Valparaíso y Viña del Mar, los fuegos que vienen
Columna de opinión de Pedro Serrano Rodríguez, director Unidad de Arquitectura Extrema de la USM.
No hay que ser profeta para anunciar lo que es un asunto históricamente recurrente: los incendios de temporada en la V Región. Sin embargo, se hace necesario dar la alerta general por las condiciones especialmente críticas de este 2021.
La temperatura media de la era preindustrial fue de 14 º Celsius, mientras en 2020 batió un record y subió a 15,2; los acuerdos globales pusieron como límite extremo un alza de 1,5º C. Pareciera entonces que el calentamiento global se precipita y estaríamos llegando este 2021 cerca de los 15,5º. ¡Un desastre global!
Ya no llegan los clásicos temporales de lluvias que acostumbrábamos a ver sobre el territorio de la zona central, donde vive la mayor parte de la población. La consecuencia es un notorio aumento de la sequía. El 2020 llovió muy poco y el 2021 podríamos decir que nada: 70% de déficit. La sequía es el problema principal del territorio provincial.
Y no se trata solamente del agua para el uso agrícola-ganadero, si no que para consumo humano por lo que deberemos esforzarnos para infiltrar, prospectar, embalsar, preservar, desalar el agua de mar y hacer eficiencia hídrica para el territorio, pero por sobre todo con un plan regional coherente. La sequía ya está aquí y con su peor cara.
Nos acecha entonces otro peligro: el fuego. Basta con recorrer los sectores rurales y sobre todo los peri urbanos de nuestras ciudades para comprobar que la carga de combustible con los pastizales y arbustos secos es enorme y descontrolada bajo el punto de vista de prospectar incendios posibles. Como nunca antes, falta el agua en los territorios, las humedades relativas serán bajas y las temperaturas de la temporada estival muy altas: sólo agregar los vientos y el coctel para los mega incendios está servido. Esto no es una profecía, casi una constatación de las proyecciones climático-territoriales. ¡Se vienen los grandes incendios en la V Región!
Millones de hectáreas de bosques y casas se han quemado en los últimos meses en el hemisferio norte; Junto con esto, insólitas lluvias de verano en Alemania, Bélgica, India y China, han devastado ciudades, amenazado represas, grandes avenidas de agua y deslizamientos de barro han provocado miles de muertos y pérdidas económicas catastróficas…¿ Que está pasando?.
La advertencia está hecha, es un enorme desafío, ahora, para las autoridades e instituciones, sería impresentable que llegado el verano se dijese “nunca imaginamos, no estábamos preparados, nos pilló por sorpresa, los recursos no llegaron a tiempo”